Porteños arman su propia brigada solidaria de instalaciones eléctricas en emergencia
Aún no tienen nombre oficial, pero sí todas las ganas, el entusiasmo y por sobretodo también ahora los conocimientos técnicos para convertirse – en lo que un grupo de 5 porteños – denomina la Brigada Solidaria para instalaciones eléctricas en emergencia.
Todo nació sin pensar en un principio en estos solidarios resultados. Producto del mega incendio del 12 de abril del 2014, y con ello la reconstrucción de numerosas casas y el levantamiento de media aguas que requerían instalaciones eléctricas, se generó el Programa de capacitación «Nuestras manos por Valpo», impulsado por la Escuela de Ingeniería Eléctrica de la Universidad Técnica Federico Santa María y apoyada por la Escuela de Psicología de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso. Iniciativa cuyo cierre se realizó este martes en dependencias de la UTFSM, donde los alumnos recibieron sus respectivos diplomas de certificación.
Lo significativo de esta iniciativa, tal como explica Ximena Castillo, miembro del equipo coordinador de emergencia de la Escuela de Psicología, «es que fueron vecinos siniestrados los que participaron en este programa y que después con los conocimiento técnicos y teóricos ya adquiridos, realizaron instalaciones eléctricas a vecinos que al igual que ellos se vieron afectados por el voraz incendio», explicó.
Talleres de solidaridad
A estas capacitaciones técnicas se les sumaron también la realización de talleres de solidaridad impulsados por la Escuela de Psicología, lo que – sin duda – fue un aliciente que potenció después la creación de la brigada solidaria. Iniciativa que pretende sumar instalaciones en más casas, más allá de las viviendas asignadas por el programa inter universidad.
Al respecto, Oscar Zamora, una de los participantes del Programa fue enfático al señalar que con la certificación – que se desarrolló en dependencias de la UTFSM – «esto no se ha acabado, al contrario, es el comienzo de nuestra Brigada… por eso la idea es que en el caso de haber emergencias como la ocurrida el 12 de abril, nosotros podamos apoyar de manera voluntaria y gratuita en todo lo que son instalaciones eléctricas básicas a familias que hayan perdido todo y necesiten levantar nuevamente su hogar». A su vez, Oscar espera sumar más voluntarios, que por un lado quieran aprender o realizar este oficio y; por otra; ayudar a la comunidad».
Por su parte, Santos Puma, también participante del programa «Nuestras Manos por Valpo», valoró enormemente la iniciativa ya que «es primera vez que logro capacitarme en un oficio, siendo también un apoyo para encontrar trabajo o de manera independiente», acotó, recalcando que se encuentra 100% comprometido con la cuadrilla de emergencia.
Ximena Castillo destacó que el Programa cumplió doblemente su objetivo, «ya que se hizo operativa la solidaridad entre la misma población damnificada, dando un giro en 180° a las lógicas asistencialistas, y donde primó el sentido último de la oportunidad que nos ofrece una crisis, esto es: salir adelante todos juntos».